Estudiantes 85 - Unicaja 62. Crónica.
Unicaja perdió por 85-62 (44-29) en un partido que, en caso de victoria, podía haberle asegurado el tercer puesto. Por parte cajista no jugó Louis Bullock debido a un proceso febril.
La primera canasta del partido la anotó Gurovic en un contraataque tras un buen rebote defensivo, pero fue lo único que anotó en los primeros minutos. Estudiantes sí que anotó y un 8-0 obligo a Maljkovic a pedir un tiempo muerto. Los malagueños tenían muchos problemas en el tiro, 0/7 tiros de campo sin contar la canasta inicial de Gurovic. Además mostraban una escasa predisposición defensiva, especialmente a la hora de bajar a defender los
contraataques locales. El tiempo muerto no sirvió de mucho, ya que la diferencia siguó aumentando (15-5). Y como viene siendo habitual esta temporada, los jugadores abusaban mucho del tiro de tres puntos, un recurso que usan cuando no tienen claridad en ataque. Pero en el día de hoy no entraban todos los necesarios para mantenerse en el partido. La entrada en cancha de Risacher y Berni por Esteller y Gurovic dio un poco de actividad al ataque cajista, pero no era suficiente. Al final del cuarto el marcador era 17-9.
El segundo cuarto empezó con una canasta de Weis tras un buen movimiento en el poste bajo y la siguiente fue una penetración de Okulaja. Parecía que Unicaja estaba decidido a jugar más cerca del aro y con ese tipo de juego llegó a reducir la diferencia a sólo tres puntos. Pero fue un espejismo, el Estudiantes seguía disfrutando de mucha facilidad en ataque, en especial con la entrada en cancha de Azofra. El veterano jugador estudiantil dio todo un recital de pases que volvieron loco a la defensa malagueña. El máximo beneficiado de los pases fue Keefe que tuvo unos minutos espectaculares, llegando a anotar hasta 16 puntos en la primera mitad. Un triple del propio Keefe ponía de nuevo diez puntos de diferencia, 23-33. Pero el recital de Azofra continuó hasta el final del cuarto. Un triple de Germán Gabriel sobre la bocina, tras otra magistral asistencia de Azofra, ponía la máxima diferencia al descanso, 44-29.
En el tercer cuarto, la cosa fue a peor, continuaron los continuos fallos en ataque pero el problema es que no se bajaba a defender los contraataques. Un 6-0 inicial llevaba la diferencia hasta los 21 puntos. A Unicaja no le entraba nada y es que practicamente sólo se tiraban triples. Una racha de tres taques seguidos anotados por parte de Risacher y Sonko, coincidiendo con una zona 2-3 que se le estaba atragantando al Estudiantes, permitió reducir la distancia de 24 a 18 puntos (61-43). Pepu Hernández paró inmediatamente el partido con un tiempo muerto para aconsejar a sus hombres como atacar la zona. Al final del cuarto el marcador era 63-46.
En el último período dio la impresión que Unicaja estaba más entonado en ataque, pero la falta de actividad defensiva acabó con las esperanzas de sus aficionados. 3 triples cómodos ante la zona malagueña, 2 de Brewer y otro de Loncar, dejaban el partido totalmente sentenciado, ya que la diferencia volvía de nuevo a los 20 puntos. A partir de ese momento el partido transcurrió sion pena ni gloria hasta el definitivo 85-62.
En el apecto individual, destacar a Risacher con 16 puntos y la labor de Kornegay y Weis. Por parte del Estudiantes, el mejor fue Keefe con 22 puntos.
La primera canasta del partido la anotó Gurovic en un contraataque tras un buen rebote defensivo, pero fue lo único que anotó en los primeros minutos. Estudiantes sí que anotó y un 8-0 obligo a Maljkovic a pedir un tiempo muerto. Los malagueños tenían muchos problemas en el tiro, 0/7 tiros de campo sin contar la canasta inicial de Gurovic. Además mostraban una escasa predisposición defensiva, especialmente a la hora de bajar a defender los
contraataques locales. El tiempo muerto no sirvió de mucho, ya que la diferencia siguó aumentando (15-5). Y como viene siendo habitual esta temporada, los jugadores abusaban mucho del tiro de tres puntos, un recurso que usan cuando no tienen claridad en ataque. Pero en el día de hoy no entraban todos los necesarios para mantenerse en el partido. La entrada en cancha de Risacher y Berni por Esteller y Gurovic dio un poco de actividad al ataque cajista, pero no era suficiente. Al final del cuarto el marcador era 17-9.
El segundo cuarto empezó con una canasta de Weis tras un buen movimiento en el poste bajo y la siguiente fue una penetración de Okulaja. Parecía que Unicaja estaba decidido a jugar más cerca del aro y con ese tipo de juego llegó a reducir la diferencia a sólo tres puntos. Pero fue un espejismo, el Estudiantes seguía disfrutando de mucha facilidad en ataque, en especial con la entrada en cancha de Azofra. El veterano jugador estudiantil dio todo un recital de pases que volvieron loco a la defensa malagueña. El máximo beneficiado de los pases fue Keefe que tuvo unos minutos espectaculares, llegando a anotar hasta 16 puntos en la primera mitad. Un triple del propio Keefe ponía de nuevo diez puntos de diferencia, 23-33. Pero el recital de Azofra continuó hasta el final del cuarto. Un triple de Germán Gabriel sobre la bocina, tras otra magistral asistencia de Azofra, ponía la máxima diferencia al descanso, 44-29.
En el tercer cuarto, la cosa fue a peor, continuaron los continuos fallos en ataque pero el problema es que no se bajaba a defender los contraataques. Un 6-0 inicial llevaba la diferencia hasta los 21 puntos. A Unicaja no le entraba nada y es que practicamente sólo se tiraban triples. Una racha de tres taques seguidos anotados por parte de Risacher y Sonko, coincidiendo con una zona 2-3 que se le estaba atragantando al Estudiantes, permitió reducir la distancia de 24 a 18 puntos (61-43). Pepu Hernández paró inmediatamente el partido con un tiempo muerto para aconsejar a sus hombres como atacar la zona. Al final del cuarto el marcador era 63-46.
En el último período dio la impresión que Unicaja estaba más entonado en ataque, pero la falta de actividad defensiva acabó con las esperanzas de sus aficionados. 3 triples cómodos ante la zona malagueña, 2 de Brewer y otro de Loncar, dejaban el partido totalmente sentenciado, ya que la diferencia volvía de nuevo a los 20 puntos. A partir de ese momento el partido transcurrió sion pena ni gloria hasta el definitivo 85-62.
En el apecto individual, destacar a Risacher con 16 puntos y la labor de Kornegay y Weis. Por parte del Estudiantes, el mejor fue Keefe con 22 puntos.