Unicaja 85 - Nizhny Novgorod 76. Crónica
Partido muy complicado el que se esperaba ante el equipo ruso. Considerado como una sorpresa de la competición, pronto lo demostró poniéndose 2 a 8 en el minuto 3. Nizhny Novgorod basa su rotación en pocos jugadores, que pronto se pusieron las pilas en Málaga. Liderados por su base Rochestie, el MVP de este Top 16 por el momento, estaban poniendo las cosas complicadas para un equipo malagueño que consiguió acercarse tras triple de Green (7-10 m.5). Pero los rusos no perdonaban un error, siendo agresivos al aro cada vez, lanzando con rapidez en muchas ocasiones, llegando a tener el marcador a favor 7-16 en el minuto 6. Los de Plaza dieron un paso al frente con mate de Fran Vázquez, triple de Vasileiadis y una canasta de Gragner, que comenzaba a aparecer (14-16 m.8). El partido se había apretado definitivamente, con un bonito duelo en pista de Caleb Green y Thompkins en la posición de 4. El americano del Unicaja alcanzó los 8 puntos en estos primeros diez minutos, por los 9 puntos del jugador del equipo ruso. Esa pequeña diferencia visitante también la marcaba el electrónico del partido, 22-23 tras un triple de Granger sobre la bocina del primer cuarto.
El festival anotador continuaba en el inicio del segundo cuarto, con un Unicaja que no le temía a correr y a ser igual de agresivo que su rival. Fueron grandes minutos de Kuzminskas, que permitieron que el Unicaja se pusiera por delante primero (29-28), y más tarde con un nuevo triple de Green con falta ampliara la ventaja hasta el 36-28. El conjunto ruso buscó balones interiores buscando a Parakhouski, pívot rocoso que los aprovechaba para recortar la diferencia (40-36). Pero el acercamiento ruso no fue más allá, sobre todo gracias a la inspiración de un gran Jayson Granger, que llegó al descanso con 18 puntos, 5 asistencias y 17 de valoración, fundamentales para que el Unicaja se fuese al vestuario ganando 46 a 41.
Las ganas de victoria por parte de los malagueños eran tremendas, querían romper esa mala racha en el Top 16. Así, el regreso de los vestuario fue con un 7 a 0 de parcial que ponía el partido 53 a 41 en el minuto 24. Pero si el Nizhny Novgorod había llegado hasta aquí con dos victorias no era por casualidad. Rochestie y Thompkins enchufaron de nuevo a su equipo y se acercaron a 7 puntos (55-48 m.27), pero dos triples consecutivos de Suárez calmaron el ánimo ruso (63-50 m.28), aunque sólo un poco. Pronto las muñecas de los mencionados Rochestie y Thompkins volvieron a poner a su equipo cerca, 64 a 57 a falta del último cuarto.
El Unicaja entraba en el último cuarto ganando, pero no iba a ser un camino de rosas el partido hasta sonar la bocina final. De inicio en el período definitivo, 2 a 9 con tres triples rusos y vuelta a empezar. Tras 33 minutos el partido estaba empatado a 66. De nuevo, final igualado en el Martín Carpena. Apretó la defensa malagueña, clave para que se parara el acierto ruso, dando además opción a alguna bola robada. El resultado de este panorama, parcial 8 a 0 de los de Joan Plaza que sería prácticamente definitivo si se jugaba con cabeza en la recta final (74-66 m.37). Y así ocurrió, los rusos llegaron acercarse a 5 puntos (75-70 m.39), pero fueron incapaces de parar el juego malagueño, y cuando lo hicieron con falta para parar el reloj e intentar forzar el fallo en el tiro libre de los malagueños, los verdes estuvieron finos desde la línea de 4,60.
Al final, victoria 85 a 76 para el Unicaja en el que destacó Jayson Granger con 29 puntos y 35 de valoración. El uruguayo consiguió su mejor marca anotadora con el Unicaja, además del récord de la temporada del equipo y su mejor actuación en Euroliga Eso sí, secundado a la perfección por Fran Vázquez (14 pts. y 24 val. ) y por un gran Caleb Green que alcanzó los 16 puntos y 20 de valoración, también hizo su mejor partido en la Euroliga hasta el momento.