Baloncesto Sevilla 94 - Unicaja 84. Crónica

El partido estuvo marcado por un gran inicio de un motivado Baloncesto Sevilla, que en el primer cuarto puso tierra de por medio. El Unicaja, quizás cansado tras el viaje a Moscú, se veía sorprendido por un equipo hispalense liderado por un Nachbar impresionante, que consiguió 15 puntos en el primer cuarto. El esloveno asumió galones, disparando el 10-7 en el minuto 3 a un 29 a 18 al final de estos diez minutos iniciales.

El equipo de Plaza debía reaccionar a partir de la defensa, pero además necesitaba la aparición del talento de alguno de sus hombres. El primero en dar el paso adelante fue Nedovic, que cuando el marcador era de 34 a 18 en el minuto 12, inició un parcial de 0 a 8 con un gran triple y una jugada espectacular que terminó en mate a una mano. Parecía que el Unicaja por fin entraba en el partido, que estaba en un 34 a 26 en el minuto 15. El malagueño Alfonso Sánchez saltó a pista para defender al inspirado Nedovic, algo que cambió la buena línea del Unicaja. Baloncesto Sevilla se puso por encima de los 10 puntos de nuevo, pero un parcial de 0 a 6 malagueño forzaba el tiempo muerto de Casimiro con 39 a 32 a falta de 2:29 para el descanso. Este parón sirvió para que los hispalenses volviesen a tomarle el tono al encuentro, disparando de nuevo su ventaja, llegándose al descanso con 48 a 36.

Tras el paso por los vestuarios el Unicaja salió mucho más agresivo en ataque, pero en defensa seguía sufriendo con el acierto de Nachbar, todado hoy por la varita de la anotación. La diferencia la conseguía mantener el equipo sevilla en la decena de ventaja, pero en el minuto 27 un par de acciones consecutivas del Unicaja apretaba el electrónico (59-55). La afición malagueña, más de 250 estuvieron en la mañana del domingo en el Pabellón San Pablo, apretaba desde la grada ante la esperada reacción de los chicos de Plaza. A pesar de todo, el Unicaja estaba en el partido al entrar en el último cuarto (63-57).

Nedovic anotaba desde el tiro libre y ponía de nuevo al Unicaja a 4 puntos, pero de nuevo, una bajada de agresividad defensiva y errores en ataque, hizo que el Baloncesto Sevilla se distanciara (69-59 m.32). Plaza solicitaba tiempo muerto e intentaba hacer ver a sus jugadores la importancia de la actitud defensiva. En pocas jugadas el Sevilla de Luis Casimiro se había puesto otra vez +10. Buscando esa mayor defensa, el técnico del Unicaja dio entrada a Alberto Díaz, que con su entrega y descaro puso algo de esperanza entre la parroquia malagueña. Pero poco duró. Los riesgos asumidos en defensa para intentar recuperar el balón hizo que el Baloncesto Sevilla encontrara buenas posiciones de tiro que aprovecharon. En la recta final el Unicaja continuó presionando y dejó el marcador en un 94 a 84 final, derrota en el duelo andaluz que deja fría a la afición malagueña desplazada a Sevilla.